Esta piedra se puede encontrar únicamente durante la estación seca en las aguas cicatrizantes del rió Narmada, uno de los siete sitios sagrados de la India.
La forma del Shiva Linga representa la energía propia de los hombres mientras que las marcas representan la energía propia de las mujeres. La forma fálica (linga) y el triangulo femenino (yoni) son representativos de ecuanimidad y fertilidad en todas sus formas auxiliando en manifestaciones espirituales y materiales.
Al manipular esta piedra, uno debe proyectar intenciones positivas pues la energía es siempre devuelta intensificada para el manipulador de la piedra.
Tan solo una vez al año antes del comienzo de los monzones, durante la luna llena, unas pocas familias entrenadas de generación en generación en el arte de seleccionar, recoger y pulir a mano estas piedras, las sacan del rió que esta en su nivel mas bajo.